¡Hola, holaaa!! Soy Ofelia, y soy artista.
¿Quieres que hagamos arte
con tu negocio?
Si me preguntan qué soy, seguramente lo primero que me vendría a la cabeza ahora mismo es «madre» (y más después de la famosa cuarentena…).
Pero, en el fondo, si hay algo que me define, que me llega y que me hace vibrar es el arte. El arte en cualquiera de sus expresiones, pero sobre todo en todo lo visual. Me sale por los poros, no lo puedo evitar aunque quiera.
Normal que me dedique al diseño gráfico, ¿verdad?
¿Te apetece conocerme un poco más de cerca?

Como muchas de mis clientas, pasé muchos años trabajando para otros, en sectores muy diferentes, pero llegó un día en el que sentí que era el momento de ser yo. De tener mi propia empresa.
Emprender.
Ay, señor, qué miedooooo…
¿Tendré clientes? ¿Facturaré algo? ¿Acabaré viviendo debajo de un puente? Todas esas preguntas revoloteaban en mi cabeza, pero quería pasar más tiempo con mi hijo casi recién nacido (sí, preciosa mía, sí: emprendí cuando mi hijo tenía solo 4 meses) y… ¡¡me lancé!!
Tenía claro que quería ayudar a las mujeres a brillar
Tenemos cualidades increíbles, proyectos increíbles e historias increíbles. Pero, la mayoría de veces, tenemos poco tiempo para desarrollar nuestro potencial nosotras solas.
¡Necesitamos ayuda!
Pero cuánto nos cuesta pedirla, ¿verdad? Estamos acostumbradas a hacerlo todo solas, a sacarnos las castañas del fuego.
Pero después, cuando recibimos esa ayuda, somos agradecidas como nadie.
¡Qué maravillosas somos las mujeres! ¡Y cuánto nos cuesta vendernos, coñis!
Yo necesito ayuda en mi negocio (y en mi vida) para muchas cosas: mi marido se encarga de hacer la comida, mis padres recogen a mi hijo de la guardería, mi amiga Mila me enchufa positividad y mis baransus me ponen bonita la web…

Hace tiempo que renuncié a hacerlo sola, y ahora me gustaría poder ayudarte a ti.
- Me gustaría ayudarte a tener una marca que de verdad hable de ti, de la que te sientas orgullosa.
- Me gustaría darte las claves para que tener tus redes preciosas sea coser y cantar (o que directamente te despreocupes de ellas).
- Me gustaría que juntas encontráramos la forma de hacer despegar tu negocio, hacerlo rentable y escalable y que tú sigas teniendo tiempo para tu familia, tus hobbies o para rascarte la barriga a dos manos, si es lo que quieres.

Porque creo que hemos venido a este mundo a entregar nuestros dones, pero también a disfrutar.
Y por eso quiero hacer todo lo que esté en mi mano para dejar de ver mujeres estresadas, cansadas, agotadas… y que encima se sienten culpables.
¡Quiero ponértelo fácil!!
Voy a poner toda mi creatividad a funcionar para que tu negocio vaya como un tiro, y tú seas mucho más feliz.
Voy a poner todo de mi parte para que tu negocio sea una obra de arte, y puedas disfrutarlo cada momento.
¿Te apetece que hagamos arte juntas?
Puedo ayudarte de muchas formas:
Si has llegado hasta aquí es que quieres saber cosas jugosillas sobre mí, ¿a que sí??
Aquí tienes unas cuantas:
- Soy adicta al olor del mar y al chisporroteo de mil gotitas de agua salada en la cara cuando paseo por la playa y hace viento.
- Me vuelvo loca por un helado de chocolate.
- Ser madre puso mi mundo patas arriba.
- Cambié la mentalidad, me hice emprendedora y confié más en mí de lo que lo había hecho hasta entonces.
- Me encantan los perros y todos los animales. Menos los bichos. Eso no, de verdad. Respect, ellos en su casa, y yo en la mía .
- Adoraba a mis abuelos y les tengo un respeto enorme a los mayores. Creo que tienen mucho que enseñarnos.
- Envío notas de voz por Whatsapp de más de 10 minutos. No puedo evitarlo, intento hacerlas cortas, pero… “¿Ay, mira, sabes qué? ¿Oye, cómo me enrollo no? Ah, no, solo llevo 4 minutos, quería contarte también que…” Pues sí, los audios que mando a mis amigas son así.
- Mi plan de domingo perfecto es un paseo por la playa.
- Mi hijo nació con una carga adicional de pilas. Hace más de un año que busco el botón de apagado (o el botón de programar el apagado a cierta hora), pero no lo encuentro. Si tienes pistas sobre el tema, puedes contactarme.
- Diseño (logos y estrategias) hasta cuando voy a la nevera a preparar algo. Mi cabeza siempre funciona y siempre crea.